Cómo interactuar con las cacatúas
Cómo cuidar a una cacatúa
Por primera vez, un equipo internacional de científicos ha demostrado que las cacatúas, una emblemática especie de ave australiana, aprenden unas de otras una habilidad única: levantar las tapas de los cubos de basura para recoger comida. La investigación, pionera en el mundo y publicada hoy en Science, confirma que las cacatúas difunden este novedoso comportamiento a través del aprendizaje social. Dirigido por Barbara Klump y Lucy Aplin, del Instituto Max Planck de Comportamiento Animal de Constanza (Alemania), junto con John Martin (Taronga Conservation Society) y Richard Major (Museo Australiano), el equipo ha demostrado que este comportamiento de las cacatúas es en realidad aprendido, y no resultado de la genética.
La coautora principal, Barbara Klump, dijo que el aprendizaje social es la base de las diferentes culturas regionales, y algunos animales, como los primates y las aves, parecen aprender socialmente. "Los niños son maestros del aprendizaje social. Desde muy pequeños copian las habilidades de otros niños y adultos. Sin embargo, en comparación con los humanos, se conocen pocos ejemplos de animales que aprendan unos de otros", afirma Klump. "Demostrar que el comportamiento de búsqueda de comida no se debe a la genética es todo un reto", añade Klump.
Cuidados de la cacatúa paraguas
Los loros son famosos por su capacidad para hablar. Además, hay muchas escenas de películas emblemáticas y vídeos de YouTube que son tendencia en los que lo hacen. Y con bastante eficacia, debo añadir. Pero pronto se dará cuenta de que se trata de guacamayos o de especies de loros más grandes. Así que es natural preguntarse si todas las especies de loros pueden hablar y, en caso afirmativo, hasta qué punto. Las cacatúas son un ejemplo...
¿Pueden hablar las cacatúas? Las cacatúas pueden hablar, aunque sólo pueden aprender un número limitado de palabras y frases concretas (entre 20 y 30, por término medio). Aunque sus dueños pueden enseñarles nuevas palabras, suele llevar un poco de tiempo y requiere cierta constancia por parte del propietario.
Por ejemplo, es probable que una cacatúa asustada emita un siseo muy marcado, mientras que una que se sienta cómoda y familiarizada con su entorno repetirá una o dos palabras aprendidas.
Por ejemplo, si saluda a su cacatúa con un "buenos días" y un "buenas noches", pronto aprenderá a captar su significado. Incluso puede responder o anticiparse a estas palabras hablando en voz alta en esos momentos.
Cacatúa paraguas
Hay varias especies diferentes de cacatúa, que pertenecen a la familia Cacatuidae. Su tamaño varía de mediano a grande y destacan por su espectacular plumaje en la cresta, su plumaje polvoriento y sus distintos tonos de blanco, rosa, gris y negro.
Las cacatúas son conocidas como aves "velcro" por su naturaleza sociable, son cómicas y traviesas, pero también pueden ser muy exigentes, lo que requiere un dueño muy dedicado que esté dispuesto a proporcionarles toda la atención que necesiten. Aunque estos hermosos pájaros pueden ser mascotas difíciles a veces hay que dejarlos solos, dejar la radio encendida puede ser una buena idea ya que los mantiene ocupados y felices ya que tienden a disfrutar escuchando música. La mayoría de las cacatúas aprenden a pronunciar algunas palabras y frases y, aunque puede parecer que hablan si se escucha atentamente, se trata más bien de un balbuceo continuo y repetitivo y, a veces, pueden ser extremadamente ruidosas, sobre todo cuando buscan atención.
Las cacatúas necesitan mucho espacio para estirarse y moverse libremente de una percha a otra y para entretenerse, por ejemplo, jugando con juguetes. Por eso, cuanto más grande sea la jaula, mejor. Como son aves activas, si es posible y seguro, deben tener la oportunidad de hacer ejercicio fuera de la jaula durante al menos unas horas al día, lo que también les dará la oportunidad de interactuar con la gente.
¿Son difíciles de cuidar las cacatúas?
Un equipo internacional de científicos ha demostrado que las cacatúas, una emblemática ave australiana, aprenden unas de otras una habilidad única: levantar las tapas de los cubos de basura para recoger comida. La investigación, pionera en el mundo y publicada hoy en Science, confirma que las cacatúas propagan este novedoso comportamiento a través del aprendizaje social.
Dirigido por las doctoras Barbara Klump y Lucy Aplin (Instituto Max Planck de Comportamiento Animal), junto con los doctores John Martin (Sociedad de Conservación Taronga) y Richard Major (Museo Australiano), el equipo ha demostrado que este comportamiento de las cacatúas es en realidad aprendido, y no resultado de la genética.
"Los niños son maestros del aprendizaje social. Desde muy pequeños copian las habilidades de otros niños y adultos. Sin embargo, en comparación con los humanos, se conocen pocos ejemplos de animales que aprendan unos de otros", explica el Dr. Klump.
Sin embargo, hace unos años, el Dr. Richard Major compartió un vídeo con la autora principal, la Dra. Lucy Aplin, en el que se veía a una cacatúa sulfúrea abriendo un cubo de basura cerrado. La cacatúa utilizaba el pico y la pata para levantar la pesada tapa y arrastrar los pies por el lateral para darle la vuelta, accediendo así a una rica recompensa de restos de comida.