Cómo respiran las ranas durante la hibernación
Hibernación de la rana verde
Los anfibios y reptiles son ectotermos, lo que significa que obtienen el calor del medio ambiente. Durante el invierno, las bajas temperaturas dificultan mucho su actividad y la escasez de alimentos contribuye aún más a este problema. La mejor estrategia para afrontar el problema es hibernar y vivir de la grasa almacenada. La tasa de metabolismo es muy reducida, por lo que no se necesita mucha energía.
Cuando las temperaturas se acercan al punto de congelación, la mayoría de las especies de ranas buscan protección por debajo de la línea de congelación. Algunas especies saltan al agua y se preparan para hibernar en el fondo de los estanques o bajo las orillas de los arroyos. Como el agua es un buen aislante y retiene el calor mejor que otros medios, es un buen lugar para esperar el invierno.
Una rana activa respira oxígeno del aire. Al menos sus fosas nasales están por encima del agua (foto superior) y se puede ver la zona de la garganta moviéndose al bombear aire a los pulmones. Para entrar en hibernación, se observan varios cambios de posición y comportamiento.
La rana de la izquierda está caliente y activa, por lo que tiene un alto nivel de actividad metabólica. Obsérvese su postura erguida, con las patas traseras recogidas cerca del cuerpo listas para saltar si se sobresalta. En cambio, la misma rana extiende las patas en una "postura de cuatro puntos" después de que su temperatura corporal haya descendido hasta casi el punto de congelación. En el fondo de un estanque, esta postura le proporciona estabilidad frente a cualquier actividad que pudiera desalojarla de su refugio invernal.
¿Cómo respiran las ranas a través de la piel?
Probablemente hayas oído hablar de respirar por los pulmones o por las branquias, pero ¿has oído hablar de respirar por la piel? Por desgracia, los humanos no podemos hacerlo. Pero la capacidad de respirar a través de la piel, lo que se llama respiración cutánea, es un rasgo común en los anfibios.
La rana es un buen ejemplo. La piel de la rana es fina y tiene muchos vasos sanguíneos. El oxígeno se difunde en la piel a través de esos vasos sanguíneos. Los vasos también permiten la salida del dióxido de carbono.
Los renacuajos tienen branquias, que con el tiempo desaparecen, porque las ranas adultas desarrollan pulmones, pero la respiración cutánea es útil en invierno, cuando las ranas suelen hibernar bajo el agua. Las ranas no tienen que obtener el oxígeno del aire. Las ranas suelen hibernar en agua rica en oxígeno, que es como pueden respirar durante todo el invierno.
Esa baba, sin embargo, es un recubrimiento mucoso, y en realidad ayuda a las ranas con su respiración cutánea. Sólo pueden respirar a través de la piel si ésta permanece húmeda; de lo contrario, una rana no podría obtener suficiente oxígeno ni eliminar suficiente dióxido de carbono.
Cómo respiran las ranas
En realidad, los sapos son sólo un tipo de rana (todos los sapos son ranas, pero no todas las ranas son sapos). Los sapos tienen rasgos distintivos diferentes de los que caracterizan típicamente a una rana. Suelen tener la piel más seca y verrugosa y prefieren hábitats más secos. Suelen tener las extremidades posteriores más cortas y el cuerpo más redondeado y robusto que las ranas más típicas. Los sapos tienen glándulas venenosas en la piel para evitar que los depredadores se los coman y a menudo desprenden un olor extraño cuando se manipulan. A veces hay ranas que se llaman sapos pero que técnicamente son ranas, lo que puede resultar confuso... y hay ranas que tienen protuberancias en la piel y sapos que tienen la piel lisa. Y está el sapo cornudo, que no es ni una rana ni un sapo, ¡en realidad es un reptil!
Sí, incluso los anfibios que hibernan en el barro bajo el agua respiran durante la hibernación. Como los anfibios pueden respirar a través de la piel, pueden absorber el oxígeno del agua durante la hibernación. Tienen que hibernar en agua que tenga una buena cantidad de oxígeno y a veces nadan en el agua durante el invierno para mantener los niveles adecuados de oxígeno. Hay algunas ranas que pueden detener completamente su corazón y su respiración y sobrevivir. Lo consiguen manteniendo un alto nivel de glucosa en la sangre, que actúa como anticongelante y protege sus órganos vitales. Cuando el clima se calienta, se despiertan y su corazón y respiración vuelven a la normalidad.
Cómo hibernan las ranas
Las ranas son animales asombrosos. A pesar de su aspecto frágil y sus formas inofensivas, tienen innumerables estrategias para hacer frente a los climas más severos que ofrece este planeta. Se las puede encontrar en el Círculo Polar Ártico, en desiertos, en selvas tropicales y prácticamente en cualquier lugar intermedio. Algunas de sus estrategias de supervivencia son sencillamente ingeniosas. Varias especies de ranas utilizan dos estrategias para hacer frente a las condiciones ambientales extremas: la hibernación y la estivación.
La hibernación es una respuesta común al frío invierno de los climas templados. Cuando un animal encuentra o construye un espacio vital (hibernáculo) que le proteja del clima invernal y de los depredadores, su metabolismo se ralentiza drásticamente para poder "dormir" durante el invierno utilizando las reservas de energía de su cuerpo. Cuando llega la primavera, el animal "despierta" y abandona su hibernáculo para dedicarse a alimentarse y reproducirse.
Las ranas acuáticas, como la rana leopardo (Rana pipiens) y la rana toro (Rana catesbeiana), suelen hibernar bajo el agua. Un error muy común es pensar que pasan el invierno como las tortugas acuáticas, excavadas en el fango del fondo de un estanque o arroyo. De hecho, las ranas que hibernan se asfixiarían si se hundieran en el barro durante un largo periodo de tiempo. El metabolismo de una tortuga en hibernación se ralentiza tanto que puede sobrevivir con el escaso suministro de oxígeno del barro. Las ranas acuáticas hibernantes, sin embargo, deben estar cerca de agua rica en oxígeno y pasan buena parte del invierno tumbadas sobre el barro o sólo parcialmente enterradas. Incluso pueden nadar lentamente de vez en cuando.