Qué pájaro duerme volando
Fragata
Antaño existía el mito de que los albatros podían volar durante años, comiendo, bebiendo y apareándose al vuelo, y aterrizando sólo para poner sus huevos. La ciencia moderna no respalda este cuento de viejas, pero la verdad verificable sobre el comportamiento de vuelo de las aves es casi igual de impresionante. El albatros de cabeza gris puede dar la vuelta al mundo en sólo 46 días, haciendo numerosas paradas en el camino. Y más que el albatros, es el vencejo alpino el que ostenta el récord de vuelo ininterrumpido más largo registrado por un ave: Uno de ellos pasó más de 200 días en el aire cazando insectos voladores en su zona de invernada, en los cielos de África Occidental.
Estos vuelos legendarios suscitan un aluvión de preguntas sobre cómo consiguen las aves tales hazañas, y la principal de ellas es la cuestión del sueño. Durante muchos años, los científicos conjeturaron que las aves de largo vuelo podían dormir en el aire, a pesar de no disponer de pruebas reales que lo demostraran. Hasta ahora. Un nuevo estudio sobre la fragata grande, publicado a principios de este mes en Nature Communications, respalda la creencia convencional, pero de forma sorprendente.
Increíbles migraciones de aves
El Parque Nacional de Galápagos ha publicado los resultados de un estudio realizado por un talentoso equipo internacional de investigadores para estudiar el ave endémica de Galápagos, la Gran Fragata (Fregata Minor).
El objetivo de los investigadores era profundizar en el conocimiento del comportamiento del ave endémica fragata grande, especialmente los patrones de sueño y cómo éste afecta a su supervivencia diaria. Los científicos decidieron estudiar a la Fregata Minor por su capacidad para sobrevolar el océano en busca de alimento durante semanas. La idea de un vuelo prolongado es interesante, ya que el ave no puede aterrizar ni dormir de forma convencional. Ya existen pruebas de que las aves duermen en pleno vuelo, como afirman los investigadores: "Se suele suponer que las aves voladoras mantienen la conciencia ambiental y el control aerodinámico durmiendo con un solo ojo cerrado y un hemisferio cerebral a la vez. Sin embargo, ahora se ha demostrado que las aves voladoras duermen".
Esta nueva investigación realizada por el equipo ha examinado esta afirmación más de cerca. El estudio fue dirigido por Niels Rattenborg, del Instituto Max Planck de Alemania, junto con Sebastián Cruz, ornitólogo afincado en Galápagos. El objetivo del equipo era determinar cuánto tiempo dormían al día las fragatas y cómo podían funcionar con tan pocas horas de sueño, mientras que algunas personas y animales sufren de forma dramática cuando les falta el sueño.
El pájaro duerme mientras vuela
Varias especies de aves son grandes migradoras, y a veces vuelan sin parar durante varios días, semanas o más. Las fragatas, los vencejos y los albatros son algunas de las aves más notables en lo que se refiere a vuelo de resistencia. Sin embargo, sus habilidades plantean múltiples interrogantes sobre cómo logran tal proeza. Es natural preguntarse cómo descansan y si pueden hacerlo en pleno vuelo.
Un estudio sobre las fragatas descubrió que duermen sobre todo con un lado del cerebro mientras vuelan, dejando el otro lado despierto. También duermen muy poco en comparación con cuando están en tierra. Durante el vuelo, duermen unos 45 minutos al día en breves intervalos de 10 segundos. En tierra, duermen 12 horas al día en intervalos de 1 minuto.
Aunque el sueño semicerebral era el más común, a veces las fragatas también dormían con las dos mitades del cerebro dormidas y los dos ojos cerrados. Curiosamente, los científicos también descubrieron que las fragatas sólo duermen cuando ganan altitud. Estas aves ganan altitud volando en círculos sobre corrientes térmicas ascendentes antes de planear y perder altitud lentamente. No duermen mientras planean.
Qué es usws en aves
Se sabe desde hace tiempo que muchas especies de aves vuelan sin parar durante días, incluso semanas, pero muchos científicos se han preguntado cómo pueden soportar ese tiempo y esa distancia sin descansar. ¿Podrían desde los pájaros cantores hasta los correlimos estar durmiendo mientras vuelan?
En el estudio, el grupo de investigadores internacionales colocó grabadoras de electroencefalograma (EEG) a las fragatas antes de que emprendieran sus viajes de búsqueda de alimento, viajes que duraban hasta 10 días de vuelo para conseguir comida.
Los científicos sabían que estas aves no aterrizan a menudo en mar abierto, ya que sus largas alas, sus patas poco palmeadas y sus plumas apenas impermeables dificultan el despegue desde el agua. Los investigadores descubrieron que las aves seguían volando durante todo el periodo y que dormían un poco mientras lo hacían.
La mayor parte del sueño era de un tipo llamado sueño unihemisférico de ondas lentas, que es cuando sólo un hemisferio del cerebro duerme a la vez. También descubrieron que el ojo del lado del cerebro despierto permanecía abierto, lo que, según su hipótesis, sirve para dirigir su vuelo.